Caldo de pollo para calentar el alma
El tradicional y rico caldo dorado codiciado por todas las generaciones.Como la penicilina, es un poderoso remedio que cura. Varias cucharadas de este alimento calienta el cuerpo y el alma.
Similarmente, para calentar nuestras neshamot -almas-, vamos a ver a maestros, padres y amigos. Ellos comparten un agradable pensamiento de Torá- a veces envueltos en alguna historia. Una declaración concisa envasa una riqueza de sentido en unas pocas palabras y puede, cuando es interiorizada, calentar el cuerpo y el alma.
Estas no son simples historias que se relacionan con todos; son historias con las que todos se pueden relacionar. No son historias comunes, así como el caldo de pollo no es una sopa cualquiera.
Escrito y compilado por Pesaj y Jana Burston.
14cm x 20cm
0.300kg
Argentina
Estados Unidos
